La multinacional KME Locsa tiene pensado presentar la documentación para liquidar la empresa e iniciar la negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) tras resultar infructuoso el proceso iniciado en el mes de abril. El director general de KME Locsa descartó que se pueda recuperar el último plan social que presentó la empresa y cualquier posibilidad de mantener la actividad de fundición como se había anunciado en el citado plan. La propuesta actual que se negociará en el ERE parte de 20 días por año trabajado con un máximo de 12 meses y sin prejubilaciones. "No creemos en una solución ni en una respuesta. La empresa está en disolución, no nos creemos nada".
El nuevo presidente del comité de empresa aseguró que tratarán de desbloquear la situación para "salvar lo máximo posible de la empresa.
La plantilla de Locsa está integrada por 118 trabajadores, de los 30 están prejubilados y 88 están en activo. En la actualidad, los empleados tienen sin cobrar tres nóminas. La empresa indicaba que acumula hasta junio unas pérdidas cercanas a los tres millones de euros. La firma anunció en el mes de abril que procedería al cierre de la empresa el 30 de junio. Locsa es heredera de la antigua Electromecánica, creada en 1917 en Córdoba.
Vía.diariocordoba.com
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