La multinacional danesa de aerogeneradores Vestas ha
presentado expediente de regulación de empleo (ERE) en su fábrica de
Villadangos del Páramo (León) que afecta a 370 empleados aunque el impacto del
cierre llegará a un total de 2.000 trabajadores en la comarca.
Mientras que se negocia, los trabajadores han instalado un
campamento permanente frente la fábrica como protesta tras el anuncio del
cierre definitivo de la factoría.
Vestas anunció el ERE un día antes de reunirse con la nueva
ministra de Industria, Reyes Maroto, y el presidente de la Junta de Castilla y
León. Ambas administraciones han criticado la "deslealtad" del grupo
ante este ERE y su falta de voluntad de diálogo.
El fabricante danés vincula el cierre a la globalización y a nuevas tendencias de aerogeneradores
de mayor potencia fabricados en sus centros de China e India y la
desaceleración de la demanda de aerogeneradores a nivel europeo por el
crecimiento de la energía solar, su competencia en materia renovable.
Estas escusas parece que la ha copiado Vestas de Siemens-Gamesa,
otro de los grandes fabricantes mundiales de aerogeneradores, que ya en enero,
cerró también su planta de Miranda de Ebro (Burgos), alegando los mismos
motivos.
Todos los españoles hemos estado pagando, de forma inconsciente
a este tipo de empresas piratas. Tras recibir subvenciones por más de 12
millones de euros y aguantar el plazo de cinco años fijado en el contrato, la
empresa danesa ha estimado que su tiempo en España ha finalizado y que los
vientos soplan mejor en Argentina o en Rusia.
La política energética de España, en lugar de ser una
cuestión de Estado se mueve por los intereses partidistas. Mientras que los
aerogeneradores y las placas solares no son de izquierdas ni de derechas si lo
son los lobbies que están detrás de los partidos.
Hemos pasado de los campeones de las renovables y la lucha
contra el cambio climático a tener tras Rajoy más 7.500 millones de euros
pendientes en una treintena de pleitos por recortes de primas a las renovables.
Estos vaivenes ya los están pagando los trabajadores y sus
familias tanto de Vestas como los de Siemens-Gamesa y todos los españoles por
el dinero dado en subvenciones y en las
posibles multas.
Desde MalditoERE, como siempre apoyamos hasta el final a
todos los trabajadores de Vestas por lo que es lo más importante. Su trabajo y
sus familias.