Una de las consecuencias del COVID es el uso de mascarillas. Quizás esto sea una de los motivos que ha originado este ERE. La empresa Vivanta, dedicada a la medicína estética y dental ha anunciado un ERE para 361 empleados.
Vivanta tiene casi 250 clínicas repartidas por toda la península ibérica y emplea a 2240 empleados. Este ERE afectaría al 16% de la plantilla, que ya está en negociaciones con la empresa. Esta ofrece el mínimo que marca la ley, es decir 20 días por cada año trabajado con un máximo de 12 mensualidades.
Según los sindicatos, la situación económica de lla empresa no es buena y ha empeorado con la pandemia.
Este ERE nos recuerda a casos anteriores del sector como el de Dentix y otros, que dejaron a muchísimos pacientes con sus tratamientos pagados, pero sin realizar. Este no parece ser el único parecido. Si realizamos una búsqueda de trabajaros actuales de Vivanta en Linkedin, veremos que muchos de ellos también trabajaron para Dentix.
Por esta situación y para evitar alamar a los clientes, la empresa está llevando este ERE con la mayor discrección, llegando incluso a notificar a sus empleados cómo deben hablar del tema con los clientes.
Vivanta fue fundada por el fondo de capital riesgo español Portobello. Este fondo compró varias empresas del sector salud durante los años 2017 y 2018.
Esta apuesta resultó en un fracaso y en 2019 las cuentas de la empresa mostraban una deuda de 260 millones de euros, adeudados entre otros a la entidad financiera BNP Paribas. Al no poder pagar esta deuda, el banco frances se ha situado como accionista mayoritario de la empresa, con la condición de realizar el ERE del que estamos tratando.
Parece ser que el sueño de crear un gran grupo de salud dental de Portobello no se va a cumplir, y muchos de los socios minoritarios de Vivanta, principalmente dentistas que incorporaron al grupo sus clínicas se sienten engañados.
Veremos como continua este ERE, que seguro va a quitar la sonrisa de la boca a muchos.