El Alavés ha presentado ante el Juzgado Mercantil número 1 de Vitoria un ERE que afecta a 32 de los 43 trabajadores, entre jugadores y personal administrativo, y que supone el primero de los pilares para asegurar la viabilidad económica y deportiva del club tras el descenso a Segunda B.
En el ERE presentado no han sido incluidos ocho trabajadores que continuarán desempeñando las tareas administrativas esenciales del club. La intención del club a la hora de establecer las indemnizaciones a los trabajadores afectados es ofrecerles una compensación de 20 días por año trabajado.
En el expediente de regulación están incluidos también diez jugadores de la plantilla que aún tienen contrato en vigor con el Alavés. Han quedado fuera únicamente los canteranos Igor y De Marcos, junto a Emilio, a quien el Alavés espera poder traspasar y obtener algo de dinero.
El club se reunió con los jugadores la semana pasada para negociar su salida del club y algunos jugadores como Garitano aceptaron su marcha y perdonaron las cantidades de futuras temporadas. Hay jugadores, caso de Roberto Cuevas, que pese a estar incluidos en el ERE siguen negociando para lograr la rescisión del contrato y negociar con otro club.
Dicen que el mundo del fútbol es de contrastes y mientras algunos clubes pagan una millonada por un jugador otros tienen que empezar a despedir para poder sobrevivir hasta al utilero.
Vía.Marca.
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